¿Qué es Hridaya Hatha Yoga?
Cultivando la relajación y la apertura
a través de la práctica del Yoga
¿Qué es Hridaya Hatha Yoga? Usando el cuerpo para descubrir el Ser
La palabra “Yoga” evoca muchas imágenes, desde sabios sentados en la postura del loto a orillas del Ganges hasta jóvenes con ropa de licra ajustada pasando de una pirueta a otra. En estos días, resulta difícil saber qué harás cuando te registras a una clase de Yoga. Entonces, ¿qué es Hridaya Hatha Yoga? En resumen, es una forma de utilizar el cuerpo para descubrir el Ser.
Más que posturas físicas
En Hridaya, practicamos el Hatha Yoga de forma contemplativa. Realizamos posturas físicas (asanas) de manera lenta y suave, y las mantenemos por un tiempo relativamente prolongado para conseguir el mayor beneficio. La práctica física está basada en el advaita, la visión no dualista. Esto significa que uno no solo está estirando el cuerpo, sino que se compromete con él, en todos los niveles. Al estar ejecutando un asana, la atención está en obtener un conocimiento íntimo del cuerpo y sus bioenergías. Se observan los pensamientos, las emociones, las sensaciones y las acciones que surgen en uno y en el entorno permaneciendo en un estado no reactivo. De esta manera, uno se conecta a la esencia del ser, el Corazón Espiritual.
Esta concentración interior es recomendada por los textos tradicionales de Tantra Yoga y del shivaísmo de Cachemira. Al favorecer la relajación y la felicidad en lugar del sobreesfuerzo o de la tensión, el Hatha Yoga es un punto de partida ideal para tu viaje espiritual.
El Yoga natural del Corazón
Hridaya Hatha Yoga es un Yoga natural, una expresión libre de energía, donde todo se hace directamente desde el Corazón. No intentamos llevar la energía de manera forzada hacia una cierta dirección o para lograr resultados específicos. Eso solo provoca que la mente y la voluntad individual se fortalezcan más.
En cambio, nuestro propósito es compartir actitudes meditativas para ayudarte a desarrollar un sentido interior de libertad. Estas actitudes imbuyen la práctica de Hatha Yoga de un significado más profundo y mejoran la capacidad para concentrarse y expresar la personalidad. Uno se vuelve más perspicaz, equilibrado y dinámico.
Yoga: alegría, relajación, celebración y entrega
El Corazón Espiritual expresa su poder de amor y felicidad en cada asana. No buscamos realizar una pose espectacular o artística, sino despertar y expresar la felicidad interior del Corazón. Esta felicidad se irradia por todo el cuerpo, eliminando la tensión, el sobreesfuerzo y el estrés. Evitamos practicar de forma mecánica y sosa, buscamos despertar la alegría, el amor y la claridad que genera la conciencia del momento presente.
Cuando uno adopta y permanece en un asana sin tensión ni contracciones musculares innecesarias, uno percibe el “esplendor” del flujo de energías. De esta manera, la práctica refleja una actitud positiva que afirma la vida. Te permite abrir el corazón y celebrar la vida. El asana se convierte en un mecanismo de transformación y sanación, un proceso para revelar el Ser superior, no solo un ejercicio energizante y saludable.
Empiezas a experimentar el Yoga como un arte espiritual, comprendiendo que las revelaciones que surgen no se derivan únicamente del esfuerzo personal, sino de la capacidad de renunciar a las limitaciones personales.
El papel del cuerpo y las emociones
Vemos el cuerpo físico como un instrumento divino diseñado para permitirnos experimentar el éxtasis de reconocer y glorificar al Uno Infinito, el advaita, en multiplicidad, el samsara.
El cuerpo es una majestuosa manifestación del espíritu, no solo una masa de materia densa. De manera similar, los pensamientos, deseos, pasiones y emociones no son obstáculos para que el despertar espiritual sea reprimido o eliminado. En cambio, son herramientas para expandir la conciencia individual e incluso trascenderla.
El cuerpo físico y las energías sutiles representan dones divinos que pueden ayudarte a descubrir la verdadera libertad. ¿Qué es Hridaya Hatha Yoga? Es una práctica que desarrolla y refina todos los aspectos del ser: el cuerpo, la mente, las emociones, la intuición y las virtudes más fundamentales.
Los siete pasos en la práctica de Hridaya Hatha Yoga:
- La Actitud de Atestiguamiento. Reconoce el momento presente, observa cualquier pensamiento, sentimiento o emoción que surja sin reaccionar a ellos.
- Relajación. Entra en el asana lenta y gradualmente, con conciencia. Mantén el cuerpo relajado y siente el gozo del estiramiento. Adopta la postura con la misma naturalidad y espontaneidad que la de un gato al estirar su cuerpo.
- Inmovilidad. Una vez que estés en la postura, intenta permanecer con la mayor quietud posible. Esto induce la quietud de la mente.
- Atención abierta. Percátate del trasfondo de la Quietud al notar cualquier sensación física o sutil, impresión, corriente de energía o activación de chakras que llegue a surgir. Cultiva un estado de observación lleno de amor, libre de análisis, etiquetas o conceptos.
- Activación de los chakras. Reconoce la energía o energías específicas que despiertan en ti.
- Energía universal. Toma conciencia de la calidad universal de la energía percibida. Ya no es “mi energía”, sino que es universal. Esto no significa que una energía universal reemplace una energía personal. Se trata simplemente de otra perspectiva del mismo fenómeno.
- Entrega. Pregúntate “¿quién Soy yo?” y entrega la conciencia del ego al Corazón Espiritual. De esta manera, la práctica de un asana se convierte en una meditación en sí misma. Te vuelves consciente de la naturaleza infinita y no dual de tu ser.